La lana de oveja se corta utilizando una herramienta específica llamada “máquina esquiladora” o “esquiladora”. Estas máquinas están diseñadas para cortar de manera eficiente y precisa la lana de ovejas y otros animales de lana. El proceso de corte implica el uso de cuchillas afiladas que se mueven rápidamente y cortan el pelo o la lana sin dañar la piel del animal.
El esquilador utiliza la máquina esquiladora con destreza para recortar uniformemente la lana de la oveja. El proceso se lleva a cabo de manera sistemática, y el esquilador debe tener cuidado de no causar heridas al animal. Para ello, el animal es sujetado suavemente, y se siguen patrones de corte específicos para obtener una lana de alta calidad. La lana cortada se recoge y se almacena en sacos para su posterior procesamiento y uso en la industria textil.
El proceso de corte de la lana es una habilidad que requiere práctica y experiencia para realizarlo de manera eficiente y sin causar molestias al animal. La seguridad y el bienestar del animal son de suma importancia durante el proceso de esquila.